ARROLLADAS POR QUERER CORTAR CAMINO
Nuestras siguientes protagonistas prefirieron morir a saltar desde una altura de 25 metros. Bueno, en realidad fue un “si tu mueres yo también”, porque una de ellas tropezó y la otra decidió “ayudarla”...
Que no hombre, en realidad no murió ninguna de las dos, pero porque debieron pillar a la muerte en el váter y no se debió de enterar... Estas dos osadas decidieron cruzar por una vía de tren que pensaron estaba abandonada, una vía de tren que se encuentra a una altura de unos 25 metros, pero fueron sorprendidas a medio camino por... Adivina?!... Efectivamente, el tren... Aunque el destino les quiso dar a las dos una nueva oportunidad, haciendo que una tropezara, que la otra tratara de ayudarla y que finalmente el tren pasara por encima de ambas sin ocasionarles lesiones, salvo algún arañazo. Que menos, no? A ver si piensas que te va a pasar un tren por encima y tu te vas a levantar más guapa que antes, con una 120 de pecho y sin estrías en el culo!!
La situación es de lo más increíble, porque si la primera no se hubiera tropezado y la segunda no hubiera tratado de ayudarla, posiblemente ambas hubieran muerto arrolladas o por la caída, aunque si no me he fijado mal creo que abajo hay agua. Igual no sabían nadar.
Cuenta la leyenda que si te pones delante de un espejo, apagas la luz, la enciendes, la apagas y la vuelves a encender...