Publicado el 22/11/2018
ANTIFA GOLPEA A MIEMBRO DEL ALT-RIGHTEl hecho de pertenecer a un colectivo antifascista te coloca automáticamente en una superioridad moral respecto a tu adversario que justifica cualquier acto que pudieras llevar a cabo porque, tu no atacas, tu no insultas, tu no intimidas... tú te defiendes, defiendes derechos y defiendes libertades.
Tu puedes ser políticamente incorrecto con alguien que es políticamente incorrecto. Está justificado. Es el "él empezó primero". Es una mezcla entre la ley del más fuerte y la del ojo por ojo.
Cuando salió Obama o cuando salió Lula da Silva, la oposición civil no tomó las calles. Habría sido un acto fascista, un ataque a la democracia. Cuando salieron Trump o ahora Bolsonaro, la extrema izquierda, o como prefieren ser llamados ellos, los antifascistas, tomaron las ciudades y se vivieron protestas y disturbios porque dichas elecciones significaban un insulto a los derechos humanos y ponían en serio peligro la democracia, pese y que hubieran sido elegidos de forma democrática.
Opiniones a parte, porque no has venido aquí para leer sobre política, y con esto ya acabo, la izquierda ha sabido jugar bien sus cartas ante la masa porque, ante ese gran grupo que no se consideran de ninguno de los dos extremos, ni de derechas ni de izquierdas, ser de lo primero es ser mala persona, eres el diablo, sin embargo ser de izquierdas es amar al prójimo y hacer el bien. Si a esto le sumas la prohibición de decir o pensar, la coacción sobra las libertades sexuales, etc... Será que la izquierda se ha convertido en la Iglesia del nuevo milenio?
Todo esto viene por el vídeo que te paso ahora. Una antifascista, un poco ida y mucho ofendida, golpea a un miembro de la alt-right no porque este le atacara antes, si no porque este no piensa como ella. El final del vídeo es bastante "Surprise Motherfucker".
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BolaExtra por pijus
Y en el "Guapas y diosas y sus cuentas de Instagram" de hoy, Hannah Palmer.
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