Publicado el 30/01/2015
EL TUMBLR DE FUGITIVE LOVERS

Somos dos fugitivos huyendo de un crimen en un viejo sedán... Dos forajidos que se camuflan vestidos como la gente normal.
Nos dicen malvados, crueles bandidos... Pero no somos malos sólo incomprendidos.

Somos dos maleantes que no piensan frenar y que dispararán si te pones delante.
Cansados del mundo y de sus contradicciones, dos expertos ladrones arriesgando la vida por sus convicciones.

El viento agita su pelo, por poco vuela mi sombrero, hay armas en el maletero y el cuentakilómetros marca un uno y dos ceros.

La sirenas suenan enfrente, por el megáfono gritan: ¡Detetente! Pero lo nuestro es ir a contracorriente.
Es un callejón sin salida, pero nada parará la huida. Saldremos volando aún sin tenero alas.
Este amor es a prueba de balas.

Huimos del trabajo, de las conversaciones intrascendentes, de los estándares y de la rutina... Nuestro refugio es la pasión, el placer y la perversión.
Este es sólo un pequeño vistazo a través del ojo de la cerradura de la puerta tras la cual nos escondemos.

Ella es Bonnie, dulce, lista y letal
El es Clyde amable, calculador y despiadado.



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Una pareja española.